Antes de que la ceniza se asentase en el edificio de los Sindicatos de Odesa, en el que al menos cuarenta personas murieron en un incendio el pasado dos de mayo, el edificio fue abierto al publico acabando asi con la esperanza de que la investigacion prometida pueda aportar respuestas creibles. La mayoria de los horrorizados visitantes que vagan por su interior no tienen duda sobre a quien culpar de las muertes: nacionalistas proucranios de extrema derecha, venidos aqui para asesinar a manifestantes prorrusos. Esa es la version de los medios rusos, pero de ninguna manera es compartida por todos en Odesa.
El largo viaje a casa 